El miércoles llegamos a Asturias D&C y yo, tras un largo viaje y cargadas de ilusión…
Hace muchos años comencé un blog llamado Puzzles sin guión. Seguramente muchas de ustedes lo recordarán. En aquella época ocurrió algo mágico en el mundo bloguero: construimos una red bolloblogueril muy fuerte y entrañable. Mujeres que compartíamos casi a diario nuestras experiencias: la vida en estado puro. Una gran mayoría de nosotras compartíamos, además, la profesión de docentes. De esta época nacieron grandes amistades. Cuando cerré las puertas de Puzzles sin guión, yo sabía que aún me quedaban muchos frutos por recoger.
Había un blog entrañable, que escondía una voz cálida, sabia…una mano que envolvía una pluma y escribía en susurro la vida secreta de las palabras.
(Alguien se acerca a mí por detrás, me llama y me dice:)
– ¿Eres Kika?
– Sí – contesto ojiplática. Ay, la amnesia…
– ¿No sabes quién soy? – me pregunta con un semblante familiar, cercano; con una mirada cálida.
– No – respondo tímidamente. Ay, qué mal, ¡cómo puedes ser tan despistada, Kika, cómo no te acuerdas de esta mujer tan tierna que te conoce!
– Tal vez si te digo mi nombre… – me dice.
– Ah, pues tal vez – qué bien, parece dispuesta a ayudarme, qué alivio, qué amable.
– Soy Mármara.
– … – aquí tiene que decir ella cómo reaccioné. Yo solo recuerdo que se me pasaron casi tres años por delante de mí en milésimas de segundos. Tardes escribiendo posts, tardes leyendo posts, comentarios, escritos, momentos compartidos…Y esa mano sujetando esa pluma que daba voz a esa vida secreta de sus palabras. Casi no me da algo. A punto estuve de caerme al suelo. Yo solo quería echarme a llorar y abrazarla, pero me contuve. Y la abracé. ¡Mármara! ¿Saben lo que era eso? No solo conozco a Marian al mediodía, que ya me tenía el corazón hiper feliz, sino que, además, venía con premio 🙂
La visita a Asturias fue por motivos profesionales, pero la vida es tan dinámica y da tantas vueltas, que siempre termina sorprendiéndote. Y resultó que lo profesional era personal. Así como lo personal es político. Fácil, ¿no?
Del viaje a Asturias me quedo con el lado humano, tanto dentro de la charla como fuera de ella. Ah, y con ese sabor a risas… ¡Ahora entiendo ese orgullín del norte! 🙂
Digo yo que reaccionaste comilfó, Kikina 😉 Y digo más, depuán, ayer, cuando abrí el enlace que me mandaste, y vi la cabecera de esta página, me hubiera dado cabezazos contra esta aparata, que no me los di porque ye muy delicadina y yo tengo la cabeza muy dura. Porque, vale que cerraras el blog, pero has seguido aquí y me lo he estado perdiendo.
Sepas que ayer comí contigo, en vez de con «El País» y, aunque no me he puesto al día, ahora que sé dónde estás, tampoco te me escapas tú a mí. Me he hecho seguidora de esta y, por supuesto de D&C.
No voy a extenderme sobre la nostalgia que sentí, porque fue una época fantástica, aquella de los blogs, que ya pasó, pero que nos ha dejado esta red bolloblogueril pa los restos.
Desde la sombra del Niemeyer, un abrazo grande, grande.